Recorremos este ícono de Recoleta y celebramos que acondicionaran su fuente para el disfrute de los vecinos.
La Floralis Genérica realizada en aluminio y acero inoxidable diseñada por el prestigioso arquitecto argentino Eduardo Catalano, se encuentra ubicada en la Plaza de las Naciones Unidas, en Av. Figueroa Alcorta y es una de las esculturas más curiosas y modernas de la ciudad.
Desde abril de 2002, fecha en la que fue donada al Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, podemos apreciarla situada en medio de un lago y rodeada de verde. Su peso es de 18 toneladas y tiene veintitrés metros de altura, la imponente Floralis Genérica es una de las figuras representativas de Buenos Aires.
La flor más imponente del mundo, se abre todos los días a las 8 de la mañana extendiendo sus pétalos al sol y se cierra con el ocaso al atardecer, para dar lugar al descanso. El horario de cierre se produce según la estación del año que estemos atravesando.
Un reloj en su consola regula, la apertura y cierre de la flor automáticamente.
“Es una síntesis de todas las flores y es a la vez una esperanza que renace cada día al abrirse”. Afirma su creador en su mensaje simbólico.
Solo existen cuatro noches especiales en el calendario en que la Floralis permanece abierta ( 25 de mayo, 21 de septiembre, y 24 y 31 de diciembre).
La ley de la flora dice que hay que nombrar sus especies en latín por ello Floralis significa que pertenece a la flora y a las flores, y Genérica indica que representa a todas las flores.