Se celebra desde el 2005, proclamado por la UNESCO para concientizar a ciudadanos consumidores y a quienes extraen la materia prima y la transforman.
Oficialmente fue la ONU, para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), quien estableció en 2005 el Día Mundial del Reciclaje, con el objetivo claro de generar conciencia y responsabilidad, no solo a los ciudadanos que consumen, sino también y/o más aún a quienes extraen la materia prima y del que la transforma en un producto para consumir.
– La regla de las tres erres: reducir, reutilizar, reciclar.
Se trata de reducir la cantidad de residuos generados y minimizar la huella de carbono.
Reducir:
tratar de adquirir productos con el mínimo de envasado, en lo posible nada y utilizar bolsas de tela.
Reutilizar:
dar una nueva oportunidad a las cosas. Pensar muy bien antes de tirar botellas, cajas de cartón, bolsas etc para que podrían volver a servirte.
Reciclar:
es posible reciclar la mayoría de los materiales que utilizamos, es nuestra responsabilidad y el de las instituciones. Si reciclamos por ejemplo 1000kg de papel, salvamos la vida de 17 árboles.
En la Ciudad se producen alrededor de 7300 toneladas de basura por día. Más del 40% son residuos reciclables que pueden recuperarse si los separamos correctamente.
Para que los materiales reciclados sean recuperados y puestos nuevamente en el sistema productivo, es necesario separar los residuos en nuestras casas. Debemos disponer los materiales reciclables por un lado los que no, por el otro, es decir la basura.